Hoy que me queda poco tiempo descubrí, que la vida es un soplo, un viento fugaz, una gota de agua que al caer se va, un susurro que el tiempo ya no retiene aquí.
Descubrí que de nada sirve llorar y sufrir, que lamentar lo que pasó no borra la faz, que vivir cada instante como si fuera el último es capaz de hacer sentir, de vivir, de gozar y de existir.
Siento que lo que nunca vi me hará falta, me pregunto si preguntaran por mí, o si aquel que me odió se reirá cuando parta.
¿Cuánto tiempo tardará mi recuerdo en surgir, cuánto pesará mi historia en la memoria del que me amó, cuántas lágrimas derramarán al saber que partí?
Sé que queda poco tiempo y estoy a punto de partir, Dios me espera, soy alguien que lo ama, no soy un santo, nadie en esta vida lo es, es verdad.
Puedo jurar que amo a Dios y un pedazo de cielo me gane, nadie puede juzgarme, solo Dios sabe la verdad, en esta vida cada uno juzga, pero solo Dios es quien sane.
Caminaré sin parar, llegaré a miles de lugares, disfrutaré de mis últimos días como tanto quise, no desperdiciaré el tiempo, reiré sin preocupaciones ni quejas.
Seré feliz como nunca, caminaré sin más pendientes ni afanes, y en la vida veré como el tiempo se va, como el calendario se desviste, deshojando los días y esperando el final sin miedos ni temores.
Caminaré y en la vida veré cómo la gente que amo se queda, caminaré y podré ver cómo lloran al verme partir, no lloren porque ya me he ido, sonrían porque fui feliz.
Siempre estaré con ustedes, aunque no puedan verme, llevaré sus plegarias a Dios para que siempre les dé su amor, no me digan adiós, porque estoy seguro que un día nos veremos.
Dios es nuestro amigo, él nos ayuda en la batalla, no soy un santo, solo un pecador tal vez, no me juzguen por lo malo que pude ser, juzguen lo bueno de mí.
En cualquier canción estará mi voz, cuando necesiten de mí, siempre estaré allí, porque desde donde esté, pensaré en ustedes.
Es hora de cerrar mis ojos, Dios dice que es hora de descansar, disfruté de cada uno de ustedes en esta vida, les doy mi palabra de que en la otra vida será mucho mejor.
Porque estaremos en un lugar donde llorar no está permitido, gracias por haberme acompañado en este día tan especial, hasta pronto, nos veremos en un futuro no muy distante.
